Hasta finales de 2027, Europa ha llegado a un pacto para suprimir progresivamente las importaciones de gas natural ruso.

Como parte de los esfuerzos para acabar con la dependencia energética del bloque europeo en los últimos diez años, la Unión Europea tomó el acuerdo de eliminar progresivamente las importaciones de gas natural ruso a finales de 2027. En junio, después de que Rusia invadiera Ucrania en 2022, la Comisión Europea, junto con los representantes del Parlamento y de la UE, llegaron a un acuerdo para terminar con las importaciones del antiguo proveedor principal de gas de la UE. De acuerdo con el pacto, la Unión Europea dejará de importar gas ruso de manera indefinida y procederá con la eliminación progresiva del crudo ruso. A finales de septiembre de 2027 se pondrá fin a las importaciones de gasoducto y a finales del año 2026, a las de gas natural licuado (GNL).